Hoy os traemos la entrevista al director de Fast English. Fast English es una academia de inglés, que tras la demanda de los padres, decidieron crear un campamento de verano de inmersión lingüística total en inglés. Los padres estaban tan contentos con la atención recibida y el aprendizaje que sus hijos habían tenido durante el curso escolar que pidieron a Fast English la posibilidad de un summer camp para poder seguir con este aprendizaje en verano.


Fast English cuenta con 20 años de experiencia en la enseñanza de inglés y 6 realizando campamentos. Durante todo este tiempo no han dejado de ponerse al día sobre las actividades que más estimulan y motivan a los alumnos y descubriendo que actividades funcionan mejor como actividad educativa.


Cuando tenemos la oportunidad de entrevistar a los directores de los campamentos siempre les preguntamos qué fue lo que les llevo a crear el campamento, es nuestra forma de transmitiros la filosofía que este tiene y los valores y objetivos que tiene con el campamento. Preguntamos a Danilo que era lo que les movió a crearlo, y esto fue lo que nos contestó:


Todo empezó con un grupo pequeño de 5 ó 6 padres. Hace años nos pedían una extensión de nuestro programa de inmersión lingüística que tiene lugar durante el curso escolar para que los niños aprovecharan el verano. Se lo pasaban tan bien durante el curso y adquirían tal soltura en el idioma que éramos un segundo hogar para ellos.Hoy en día nuestro campamento supone un reto a los alumnos, para que salgan de su zona de confort, aumente su autoestima, y estimule su creatividad. Durante el primer verano que hicimos el Campamento de Verano, los niños fueron los que nos pedían a nosotros hacer cosas que normalmente no harían en su día a día en sus casas. Así que nos tocaba a nosotros pensar en las cosas que llevábamos sin hacer desde que éramos niños. Pintar las paredes con las manos, hacer un ajedrez humano, crear monstruos intergalácticos y disfrazarse de superhéroes, aprender a hacer tartas de queso…Poco a poco los niños nos iban dando sugerencias, y nosotros íbamos modificando esas ideas. De esta forma entre niños y coordinadores creamos el Campamento urbano de inmersión que tenemos hoy en día, un segundo hogar.

A la hora de planificar el programa nos contó que para ellos cada año es un reto, ya que intentan aspirar más alto e innovar para
no dejar de sorprender a los niños. Talleres, excursiones más asombrosas y un horario diario que les estimule. Nos transmitió la dificultad que esto suponía, pero a la vez lo reconfortante que era ya que gracias a esto siempre cumplen las expectativas que tienen depositadas en ellos y los alumnos siempre se lo pasan genial. Tratan de diseñar actividades que estimulen a los niños de todas las edades del campamento. Actividades dirigidas para los más pequeños, otras actividades para los más mayores y sorpresas para los más atrevidos. Unido a esto también desarrollan el programa de exigencia lingüística para los alumnos de diferente nivel, de esta forma los profesores saben a qué aspirar durante cada actividad con cada alumnos. Nos dijeron que lo primordial es que lo pasen bien y aprendan, su objetivo es que aprendan mientras se lo pasan bien.

No quisimos dejar pasar la oportunidad y preguntarle desde su punto de vista que le aportaba el campamento al niño, su contestación fue esta:
Nuestro objetivo es que aprendan mientras se lo pasan bien. Honestamente, después de haber ayudado a diseñar los campamentos y haberlos vivido en primera línea con los niños, sé que el ambiente que creamos es un ambiente muy distinto al contexto escolar y familiar. Les damos la oportunidad de desarrollar su personalidad y potencial como persona mediante la interacción con los otros alumnos en las actividades de inmersión lingüística total.Creo que lo que más le aporta nuestro Campamento a nuestros alumnos es la oportunidad de estar un paso más cerca, a desatar su verdadera personalidad y descubrir quiénes son en verdad, sin restricciones de rutina y normas demasiado restringentes, empujándoles a que se desenvuelvan en un entorno nuevo y exigente.Hemos tenido niños extremadamente tímidos que terminan tomando las riendas de un grupo durante distintas actividades, hemos tenido a niños que comienzan a atreverse a decir lo que pensaban en público. Alumnos que no se atrevían a soltar la mano del profesor acabar escalando y montando a caballo, niños acostumbrándose a respetarse entre ellos y a respetar el entorno, entrando en el hábito de recoger, limpiar y cuidar el material de todos.
También le preguntamos a cerca de la alimentación ya que sabemos que es un tema que preocupa a los padres, tienen diferentes formas de organizar la comida durante el campamento y esto es lo que nos contó:
Establecemos dos opciones para la comida de los alumnos durante el Campamento. En primer lugar, la más económica y preferida por los alumnos: Traer comida de casa. La mayoría de los alumnos prefieren la comida de mamá o la abuela, y es mucho más fácil darles de comer, y un ahorro referente a los gastos del Campamento. Los papás traen la comida de casa, y nuestro equipo calienta la comida a la hora de comer.La segunda opción es para los padres que no precisan de mucho tiempo y que prefieren que les echemos una mano de esta forma pueden contratar nuestro servicio de Catering. Todos los días media hora antes de la comida, nuestro servicio de Catering nos entrega la comida de los alumnos inscritos en dicho servicio. Para ello establecemos una fecha límite de confirmación para hacernos una idea de la cantidad de menús que deberemos pedir. Al inicio de cada semana entregaremos el menú del servicio de Catering.
Desde SoloCampamentos queremos agradecer a Danilo y a Fast English su colaboración con nosotros.