Hoy entrevistamos a Gonzalo Fernández de Córdoba, que gestiona el campamento de Orientación Cívico-Militar “El Gran Capitán” y venimos a contaros todo lo que nos ha dicho sobre su campamento. Se trata de un campamento organizado y planificado para dar estructuras educativas y formativas, basadas en el respeto y en el orden, entre otros valores tradicionales, en la milicia y en nuestra cultura.
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Le preguntamos ¿Cuántos años llevas en el sector?
En el sector llevamos 10 años en este campamento en concreto, pero quizá lo más destacable no es sólo los años que llevamos en el sector, sino la cantidad de niños y adolescentes con los que hemos trabajado en todos estos años. Nuestro campamento desde el inicio y por ser muy peculiar, siempre se ha llenado en todos los años, por lo que han pasado en las cuatro semanas que hacemos anualmente, desde mediados de julio a mediados de agosto, 220 chicos por semana, lo que son más de 800 asistentes por año.
Otro punto a tener en cuenta es que los asistentes que en los primeros años provenían de España, cada vez se ha diversificado más y se ha internacionalizado, viviendo desde hace años chicos de México, Colombia, Guatemala, Usa, Canadá, países árabes, del este de Europa, y del resto de la unión Europea, por lo que tenemos amplia experiencia en tratar con chavales con diferentes idiomas y culturas, con sus peculiaridades.
¿Qué te animó o motivó a crear el campamento?
El campamento se creó sin pensarlo, fue una conversación un miércoles por la noche en el mes de noviembre del 2013, el sábado visitaba la primera finca que me aconsejaron en una página de fincas de campamentos, y el domingo aboné la reserva. Fue pasión y vocacional completamente, siendo guardia civil retirado siempre he llevado en el alma grabados los valores de la Cartilla del Guardia Civil, lo que ha supuesto para nosotros una guía espiritual desde siempre, mostrar ese espíritu y esos valores a las nuevas generaciones y enseñarles que hay otra manera de ver la vida y de hacer las cosas consideramos que es muy útil, además de mostrarles qué se pueden encontrar en la vida militar y policial, cosas muy diferentes de los ambientes comunes.
Les preguntamos qué es lo que cree que el campamento aporta a los niñ@s, esto fue lo que nos contestó:
Nosotros intentamos darles orden y sistema a su ritmos de vida diario, darles estructuras educativas, y la estructura y el orden da seguridad. Huimos completamente del caos, del libre albedrío y del azar. El campamento le da aire al niño pues se relaciona con chavales que no conoce, que provienen de mil lugares diferentes y que por 24 horas conviven con todos ellos, y deben ayudarse en los momentos complicados, y celebran los logros. Juntar a los chavales en grupos de 30 (secciones) en un bote y agitarlos y darles la presión de las actividades diarias junto al punto de dureza que tiene y debe tener el campamento militar, hace el mágico efecto de convertir lo que son individualidades en el inicio en grupos, y finalmente en una unidad cohesionada que funciona al unísono, lo que es mucho más que la suma de todos ellos. Aprenden finalmente que se deben a la unidad, y que deben dejarse ayudar y deben ayudar al resto, los que al final no son otros asistentes, sino mucho más, acaban siendo familia.
A la hora de planificar el programa del campamento ¿Qué tipos de factores tenéis en cuenta?
La planificación de un campamento así tiene en cuenta mil factores y mil circunstancias. Es un campamento cuyo material consta de unos 15 pales aproximadamente de material, tenemos un contenedor marítimo en la finca que cumple funciones de armería y almacén del material de campo, con replicas de airsoft, uniformes, banderas, sables, altavoces, proyectores, material de campo militar, mochilas, botiquines, camillas, mangueras, llegando a adquirir parte del material, el considerado como crítico doble en previsión de averías.....a eso debemos añadir la planificación horaria de grupos, asignaturas, material, salidas...se trata de convertir una casa de campamentos en una base militar por un mes, teniendo su oficina de Plana Mayor, enfermería, armería, almacén de material, campo de tiro... es realmente complicado.
La alimentación durante la estancia del niño en el campamento es algo que interesa mucho a los padres ¿nos podrías contar un poco cómo organizáis el menú del campamento?
Nosotros tenemos la premisa de que no se puede tirar comida, allí todos deben comer lo que hay, no estamos a gustos ni a preferencias, tenemos un menú semanal establecido y pactado con la casa de campamentos, equilibrado y primando la fruta del tiempo y la variedad en las comidas, es una máxima que seguimos no por ahorro, sino por educación, de tal manera que allí se como lo que hay, y no hay otra cosa. Se puede repetir cuantas veces se quiera y siempre sobra comida porque no se la acaban, nadie come en campamentos como allí, tenemos que tener en cuenta que es un campamento exigente y con chicos de una cierta edad que están en edad de comer y mucho. Diferente es cuando estamos ante intolerancias o alergias lo que debe consignarse en la hoja de declaración de salud que se entrega al llegar, y eso lo llevamos muy estricto. No nos da problema porque la casa lleva muchos años haciendo comida para campamentos y están acostumbrados a intolerancias y alergias, son los que primero cogen la comida y después pasa el resto. Es un asunto muy serio y que tomamos como debe ser.
¿Cómo recomiendas que sea la comunicación entre los padres y el niño durante el campamento?
Nuestra idea es que el campamento resulte una experiencia que haga crecer al chico, y eso sólo lo podemos conseguir despegándolo de los padres por unos días y que se vea solo ante sus compañeros y monitores, por lo que los primeros 3 días no llaman para desenganchar a padres y a niños, a ambos, y llaman ellos a sus padres dos veces en semana después de la cena unos minutos, el resto del tiempo los móviles y cargadores están en una bolsa y dentro de una caja en la oficina. Porque es posible la vida sin móvil. Si hay algún problema es la dirección del campamento quien llama a la familia, y las familias siempre pueden llamar si algo precisan, pero si no hay noticias es buena noticia.
¿Qué crees que te diferencia del resto de los campamentos?
Los monitores son la clave, somos una familia que nos conocemos y trabajamos desde hace años, cohesionada y con una comunión de valores y principios comunes, venimos de diferentes cuerpos y armas pero funcionamos como uno sólo.
La entrega, el esfuerzo y el sentido de sacrificio de los monitores resulta extraordinario, esos monitores son los que comparten vida con los chavales las 24 horas, y son las personas a las que ven cada día y comparten y son la imagen de referencia para ellos, no olvidemos que todo el que tiene contacto con chicos educa sin darse cuenta. Ellos nos ven, cómo hablamos, como nos comportamos y cómo nos movemos, convivir es educar, y es muy importante por ello la educación en el ocio, no somos payasos en sentido despreciativo, somos educadores aunque a muchos les parezca otra cosa.
Desde tu punto de vista ¿qué caracteriza a un buen monitor en el campamento de verano?
La integridad personal y moral imprescindibles. En nuestro campamento es necesario ser primero que todo buena persona, ello conlleva ser buen compañero, y buen monitor viene necesariamente, va pegado, porque si es buena persona y buen compañero, es generoso, y tiene que ser buen monitor. Son el puntal del campamento, son los que enseñan, escuchan muchas veces y consuelan penas de los chavales, porque allí en confianza salen muchas cosas de su vida que nos explican porque les afectan y preocupan, e intentamos ayudarles, aconsejarles desde la buena fe, y finalmente son a quien los chavales quieren parecerse finalmente, siempre hay monitores a los que por un motivo u otro los chavales admiran.
¿Cuál es la actividad que más disfrutarías de vuestro campamento si fueras niño?
La pista americana, pista de obstáculos, sin duda, recorrido muy exigente con obstáculos, cuerdas, barro, agua, salto, reptar, ejercicios de fuerza, resistencia, combinado con tiro de airsoft. También los juegos cuarteleros que se hacen el día antes de acabar la semana, en los que compiten por grupos en pruebas parecidas a la pista americana y se involucra todo el campamento, tenemos pruebas de fuerza, arrastre de vehículos, agua, carrera, pesos, cuerda.....
¿Nos puedes contar alguna anécdota que recuerdes de algún campamento?
Una mañana alas 6,00 salí a dar una vuelta por la finca y me quería acercar a ver los que dormían en el campo, y al pasar por la piscina, vi a la socorrista junto a 10 chicos formados en descanso delante de la puerta, me quedo muy sorprendido, les pregunto qué hacen allí a esas horas que el agua está helada, que viene de manantiales de las cumbres y está fría horrores, y me dicen que son los “Navy Seals”, cuando veo a un monitor que llega corriendo diciendo que son sus clavales, que se van a tirar a la piscina y a ejercitarse en ambiente hostil antes de la hora de levantarse, a lo que después de despedirme me quedé pensando que estamos muy muy locos, muy mal de verdad, y fui a buscar a los que hacían vivac, los que me dieron el alto, me hicieron tirarme al suelo hasta que llegara el jefe del grupo, pues tenían vigías haciendo guardia. Está claro que en el campamento cuando crees que es duro, hay quien te pide mucho más.......
Desde SoloCampamentos queremos agradecer a El Gran Capitán. su tiempo y que nos hayan dado a conocer más de cerca sus campamentos. Si os ha gustado todo lo que nos han contado, aqui podéis Ver información de los campamentos
¡Feliz búsqueda de campamento de verano!